Así te tendrá totalmente controlado la DGT en la carretera a partir de 2026


SEGURIDAD VIAL

Una aplicación conectará a los conductores con la DGT para recabar información relativa a la seguridad vial

Vivimos en una época de hiperconexión. Todo lo que hacemos y decimos pasa por nuestros dispositivos conectados a internet. Ahora, la Dirección General de Tráfico quiere subirse también a este tren.

El proyecto DGT 3.0 es una plataforma de vehículo conectado que será obligatoria de cara a 2026. Un paso más hacia la seguridad vial y la prevención de accidentes de tráfico, pero que pone en entredicho la importante cuestión de la privacidad.

Aunque se presentó en 2017, aterriza ahora

Fue en 2017 cuando el organismo presentó por primera vez el proyecto DGT 3.0, aunque nunca llegó a aterrizar del todo. Ahora han sacado a licitación el sistema de mantenimiento y servicios de la aplicación, con un presupuesto de 3,3 millones de euros.

Básicamente consistirá en una app a la que deberán estar conectados todos los automóviles, motocicletas, camiones y autobuses. Mediante la misma, la DGT tendrá conocimiento de todo lo que ocurre en las carreteras españolas.

Según informa el propio organismo, esta iniciativa facilita la interconexión de todos los actores que forman parte del ecosistema de la movilidad –fabricantes de vehículos, proveedores de servicios de navegación, aplicaciones de movilidad, ayuntamientos, plataformas de transportes público, sistemas de gestión de flotas, etcétera– para ofrecer en todo momento información de tráfico en tiempo real a los usuarios de la vía.

Es una plataforma de tecnología de internet de las cosas (IOT) que pone en contacto a todos los actores del tráfico de forma anónima para proveer información relativa a la circulación, notificar y detectar situaciones de peligro. El objetivo es lograr una movilidad más segura e inteligente.

Un sistema similar a Waze pero con la DGT

En resumen, supone un servicio muy similar al que ya brindan aplicaciones como Waze o la propia página web de la DGT, alertando de zonas con tráfico ralentizado y atascos, inclemencias meteorológicas, accidentes, averías en carretera, obras… También incorporaría un sistema de llamada inteligente para informar de accidentes y emergencias. E incluso recaba la información de los sensores de los vehículos (esos que anuncian baja presión en los neumáticos, por ejemplo).

Solo que en este caso es la DGT quien percibe y maneja toda la información transmitida por los vehículos. De este modo, el organismo dependiente del Ministerio del Interior sabrá en todo momento dónde te encuentras y a dónde te diriges. Otros datos que podrían incluirse en el alcance de la plataforma son la velocidad a la que se circula, cuántos ocupantes hay en el coche o incluso si el conductor está fumando.

En cualquier caso, la DGT ya ha remarcado que el tratamiento de los datos será seguro, confidencial y se limitará a un uso exclusivo encaminado a reforzar la seguridad vial. Dado que la idea es hacerlo efectivo en 2026, son muchos los detalles y flecos pendientes de concretarse al respecto del funcionamiento, utilidad y regulación del proyecto.